¿REPETIMOS?

Doce días después de la fecha prevista me ingresaron en el hospital. Pasé allí todo el día y, cuando empezaba a estar cansada de tanta habitación, la matrona me dio la gran noticia, ¡estaba de parto!. Cuatro entusiasmadísimas horas después aparecía entre mis piernas la cabecita de mi pequeña; En el paritorio su padre, que llevaba nueve meses diciendo que no entraría, y yo, mirando a nuestra niña con los ojos llenos de ternura y amor. Fue el momento más maravilloso de nuestras vidas. Es una experiencia imposible de olvidar, y no por los dolores, como muchos imaginaréis, sino por todas las emociones y sensaciones que nacieron aquel 7 de agosto con Sara.

Hoy que está francamente difícil conciliar la vida familiar con la profesional todos los políticos se ponen a la cabeza en cuanto a promesas que, raramente salen del electoralismo barato imperante. Sí, a mí ya me han ingresado los 2500 euros prometidos, esto saldará en algo los gastos acometidos antes de la llegada de mi bebé, pero ni los 3000 del Partido Popular, que tan airadamente se jactaba de haber propuesto, podrían ayudar a una familia a criar un hijo. El desembolso que requieren los hijos es extremadamente alto en nuestro país. Aún con la nueva ley, España sigue a la cola europea en cuanto a lo que a ayudas por hijo se refiere, por no hablar de becas y subvenciones. Claro que, un país sin demasiados "ilustrados" es un país fácil de gobernar. Dadle poco que pensar a la gente porque ya hay bastante trabajo.